Pedro Sánchez refuerza la sanidad pública con tecnología de cuarta generación
Pedro Sánchez refuerza a España como referente global en ensayos clínicos, medicina personalizada y tecnologías sanitarias avanzadas con 152 millones para investigación en salud y un sincrotrón de cuarta generación.
España pasa del recorte al referente
Mientras la derecha sueña con volver a los recortes, Pedro Sánchez empuja a España a la liga de los países que apuestan por ciencia y salud de vanguardia. Más de 152 millones para la Acción Estratégica en Salud 2026, un 40% más que en 2018, no son un titular vacío: son proyectos concretos en cáncer infantil, enfermedades neurodegenerativas, infecciosas y preparación frente a pandemias que terminan en hospitales públicos, en vidas salvadas y en diagnósticos más rápidos.
España no es ya un “alumno aplicado” de segunda fila: es un referente global en ensayos clínicos, medicina personalizada y tecnologías sanitarias avanzadas, y esto no pasa por arte de magia, pasa porque hay un Gobierno que mete dinero público donde otros metieron tijera.
Salud de Vanguardia: país que invierte en cerebro
El Programa Estratégico Salud de Vanguardia 2025‑2027 da continuidad al que ha sido el proyecto más ambicioso en salud de la historia reciente, con más de 2.800 millones movilizados desde 2021, en su mayoría inversión pública. La apuesta es clara: medicina personalizada, preventiva, predictiva y participativa, fabricación propia de biotecnología, tecnología sanitaria y medicamentos innovadores, e incorporación de inteligencia artificial al sistema público de salud.
Mientras algunos agitan bulos contra la sanidad pública, el Gobierno fortalece el músculo científico del Sistema Nacional de Salud para que no dependamos de multinacionales ni de gobiernos ajenos a la hora de acceder a tratamientos de última generación.
ALBA II: un sincrotrón frente al ladrillo
La inversión de casi 1.000 millones en 15 años para transformar el Sincrotrón ALBA en una infraestructura de cuarta generación es política industrial, sanitaria y territorial a la vez. Hablamos de una de las mayores inversiones científicas de la historia de España, clave para investigar cáncer, desarrollar nuevos materiales y situar a Catalunya y a España en la vanguardia mundial de la nano‑imagen biomédica.
Donde antes se levantaban aeropuertos vacíos y pelotazos urbanísticos, ahora se levantan instalaciones científicas que generan empleo cualificado, industria avanzada y soberanía tecnológica.
Política útil: ciencia, salud y feminismo
Este giro hacia un modelo productivo basado en conocimiento y talento se sostiene en datos: desde 2018, la inversión en I+D ha crecido más de un 60% y el empleo en I+D un 31%, por encima de la media europea. No es propaganda hueca, es reconstrucción de un tejido científico devastado por años de austeridad.
Y se cruza con una agenda feminista que profesionaliza la igualdad y refuerza lo público, frente a los que sólo saben hablar de “chiringuitos” mientras bloquean cualquier avance estructural.
#PedroSánchez #España #salud #ciencia #investigación #ensayosclínicos #medicinapersonalizada #tecnología #sincrotrón #ALBA #I+D #sanidad #PERTE #innovación
Comentarios
Publicar un comentario